2/12/12

Alexander Wang tomará las riendas de Balenciaga


Nombrado para sustituir a Nicolas Ghesquiere en Balenciaga, el diseñador Alexander Wang ha confirmado a sus 28 años de edad su reputación como un creador brillante con prisa.

Su última colección para la primavera 2013, que llegó a las pasarelas de Nueva York en septiembre, logró entusiastas críticas por sus vestidos y faldas de cuero calado que desafían la gravedad, con complejos cortes que se ajustan por arte de magia a la piel y sus modelos fosforescentes que brillaban en la oscuridad de la noche.

Nacido en California pero de padres taiwaneses, Wang ha desarrollado un estilo que mezcla los cortes ultraprecisos y vanguardistas con un acento marcadamente masculino. Y le ha aupado a disfrutar de un estatus con el que muchos diseñadores más experimentados sólo alcanzan a soñar.

El creador favorece el blanco y negro, pero también empuja los límites con el uso de vivos colores, tal y cómo hizo cuando sorprendió a sus seguidores en el desfile de primavera-verano de 2009 con fuertes naranjas, violetas y rosas.

Wang tenía 18 años cuando dejó San Francisco para estudiar en Parsons, la escuela de diseño más prestigiosa de Nueva York. Realizó posteriormente pasantías con Marc Jacobs y Derek Lam y en su segundo año en la escuela diseñó la primera colección que lleva su nombre.

Sin llegar a terminar sus estudios, Wang comenzó un meteórico ascenso con su primera colección prêt-à-porter en 2007, que combinaba looks urbanos relajados, descontraidos a la vez que exigentes y chic que se comercializaron en más de 200 tiendas.

Al año siguiente, Wang ganó el prestigioso premio Council of Fashion Designers of America (CFDA)/Vogue, que le reportó una bonificación de 200.000 dólares.

En 2009, Wang lanzó una altamente codiciada línea de camisetas, musculosas y vestidos de algodón, junto a altas sandalias, otra de sus pasiones.

De nuevo fue reconocido por su brillantez, y fue condecorado con el premio Swarovski como diseñador del año de ropa para mujeres. Al año siguiente recibiría el mismo premio en la categoría de accesorios.

Los diseños de Wang se han convertido en mayoritarios y su ropa se vende en tiendas como Barneys, Neiman Marcus y Selfridges, donde se puede obtener no sólo ropa, sino también accesorios, bolsos y calzado o su línea para hombres.

El celebrado diseñador ha colaborado también con cadenas de menor rango como Gap o Uniqlo, mientras que su boutique en el Soho de Manhattan, que se inauguró en 2011, es un sitio de visita obligada para todos los seguidores -y víctimas- de la moda. El pasado noviembres sus seguidores hicieron colas durante horas para asistir a tres excepcionales días de rebajas.

El diseñador conocido por correr por las pasarelas al final de los desfiles claramente no quiere esperar, y cuenta ya con planes para abrir una decena de tiendas alrededor del mundo, incluida una boutique de dos plantas en Pekín.
Aunque comenzar en Balenciaga podría retrasar alguno de esos proyectos.